PESCA A MOSCA CON CAÑA FIJA

0

Hoy vamos a ver esta modalidad de pesca, perfecta para ríos pequeños o muy pequeños, cerrados de vegetación y que nos impedirían pescarlos con muchos otros métodos.

Cuando pensamos en la pesca a mosca normalmente imaginamos la mosca seca o con cola de rata. Ríos amplios y lances espectaculares. Sin embargo la pesca con mosca tiene más variantes, como por ejemplo en spinning, con buldó. O con caña telescópica, fija. Es en la que hoy nos vamos a centrar.

Es un método muy efectivo y dinámico. Entretenido, al tener que clavar. Viendo los saltos con seca y permitiéndonos pescar ríos que de otra forma sería imposible. Ya no solo con mosca, si no casi con cualquier otro método. Pequeños arroyos, cauces cerrados de vegetación tanto por el exterior como dentro del río…

zona-de-vegetación

La técnica es muy sencilla, simplemente exploraremos los puntos en los que lo haríamos con otros cebos. Aquellos en los que pensemos que puede haber una trucha puesta para picar. La diferencia será que lo haremos con una caña telescópica, sin anillas, y un tramo de hilo corto.

Hasta hace unos años no se puso demasiado de moda esta técnica, sobre todo, por el impedimento que teníamos en las cañas. Con la aparición de carbono y la bajada de precios que ha tenido, haciéndolas asequibles a todos los bolsillos, su uso ha proliferado. Ya no es raro ver pescadores con este método (o con cebo natural con este mismo tipo de cañas)

EL MATERIAL

Otra de las ventajas es el poco material necesario. Se reducirá a: caña, hilo y moscas.

Caña: Para este tipo de pesca se suelen utilizar cañas de entre 7m y 8m de longitud, siendo las más recomendables las de 7m. Menos de esto, por ejemplo 6m, hará que tengamos que acercarnos demasiado, mostrándonos y espantando en muchas ocasiones a la pieza. Las de 8m en según qué ríos, puede ser ya incómoda, por demasiado larga. Nos será útil en ríos más grandes.

en-el-río

Detalles a tener en cuenta. Primero el peso, por supuesto. Cuanto más ligera, más cómoda, hay que pensar que estaremos varias horas con el brazo estirado, sujetando la caña, y puede cansar. Sobre los 300gr es lo recomendable. Y cierta resistencia. Las plegaremos y estiraremos muchas veces, y el carbono sufre desgaste ahí, por lo que es recomendable una caña un poco resistente. Otro detalle importante es la puntera, y es que no buscaremos la más sensible, como sucede pescando a cebo, si no que será mejor una que nos aporte un poco más de rigidez (por supuesto siempre dentro de punteras finas. El motivo es para la clavada, nos interesa que no ceda demasiado perjudicando una clavada eficaz. Pero ojo, no nos pasemos, porque una puntera demasiado rígida no trabajará bien, no doblará, si la pieza no tiene un peso grande.

puntera

También necesitaremos una caña potente, para, en el caso de una buena pieza, poder trabajarla y tener una cierta seguridad.

Hilo: Dependiendo de la pesca que vayamos a realizar, tipo de mosca y sobre todo piezas a capturar, elegiremos más o menos diámetro. Para la trucha, en tamaños normales en Galicia (que normalmente no llegarán al medio kg) una buena elección será un 0,16. Debemos pensar que poner un hilo demasiado grueso o muy resistente no vale de nada, puesto que la limitación vendrá dada por la propia caña. Si ejercemos demasiada fuerza, podremos romper la puntera. En caso de una trucha buena, deberemos trabajarla con calma, hasta que se canse, y luego cogerla.

hilo

Así pues, un hilo entre el 014 y 0,18 será más que suficiente, recomendando el 0,16.

Moscas: Por supuesto aquí lo importante será si vamos a ir con seca, con ahogada o con ninfa. Lo veremos luego en la sección de técnica. Usaremos las mismas que con los otros métodos, mismos tipos: efémeras, tricópteros, ahogadas leonesas…

final

TÉCNICA

Por supuesto es imposible explicar perfectamente la técnica en un texto como este, aparte de que “cada maestrillo tiene su librillo”, pero vamos a intentar dar unos consejos generales para permitir empezar e ir mejorando a quién le interese.

Como hemos dicho, consistirá en recorrer los puntos en los que pensamos que pueda estar apostada una trucha para comer. Y aunque hay gente que le llama “floreo” e incluso hablan de mover la mosca sobre la superficie del agua, en nuestra opinión eso no es en absoluto necesario. E incluso nos atreveríamos a decir que contraproducente. En nuestra opinión es una referencia que viene de la pesca con cebo natural (saltamontes) en los que se hacía eso para darle algo de vida e incitar a la picada.

salto-trucha

Lo que haremos será simplemente posar la mosca en un punto para dejarla recorrer, a la misma velocidad que la corriente, la zona. Nada más que eso.

Para empezar es recomendable hacerlo con mosca seca, pues veremos perfectamente si lo estamos haciendo bien o mal. La mosca no debe hacer movimientos extraños sobre el agua (ni por debajo, cuando estamos con ahogada o ninfa) simplemente derivar de forma natural.

La complicación será esa, que se vea un movimiento de forma natural. Que nos limita la longitud del hilo (corto, como veremos más adelante) Será con el movimiento del brazo y cuerpo, acompañando el movimiento. Si la arrastramos sobre la superficie, moviéndola más rápido que la corriente, o si la retenemos, al ir más lentos, perderá muchísima efectividad.

Como veremos, nos permitirá pescar en medio de la vegetación del río de forma eficaz.

La pesca la podremos hacer con mosca seca, como hemos visto. Aunque también con mosca ahogada, ninfa o en tándem (una ahogada y una ninfa, dos ahogadas o dos ninfas) Pescar con tándem complica bastante la labor por lo que es recomendable estar ya experimentado. Pescando con señuelos hundidos, como los anteriores, no vemos las moscas ni la picada. Por lo que es importante estar muy atento, llevar la línea algo tensa y así notar el toque y clavar.

pescando-en-corriente

Para avanzar por el río, muchas veces será más cómodo llevar la caña agarrada por el medio o hacia la parte de delante, con la mosca en nuestras manos, y la caña arrastrada por detrás sobre el agua. Especialmente en zonas con mucha vegetación, que podría hacer que enganchásemos la mosca si vamos con ella colgando y la caña por delante.

La clavada: En esta pesca es importante clavar. Aunque a veces ellas mismas lo hacen, cuando comen bien, en muchas otras ocasiones si no lo hiciésemos simplemente veríamos el salto y nada más. El pez ataca y escupe el engaño rápidamente. La clavada no debe ser un movimiento brusco, ni mover mucho la caña. Simplemente un golpe de muñeca, que la puntera se desplace apenas 20cm para tensar el hilo. Con eso será suficiente.

salto

Cuando estamos con mosca seca será sencillo, pues habremos visto el salto (importante no perder nunca de vista la mosca) pero cuando van hundidas, se complica. Por eso debemos llevar el hilo algo tenso y cuando veamos o notemos movimiento clavar de la misma forma.

La lucha: Aquí viene otra parte importante de la acción de pesca. Una vez clavada debemos mantener el hilo tenso, con la puntera trabajando. Mientras esté tenso, no se suelen soltar, y cualquier coletazo fuerte lo amortiguará la propia caña. Una trucha grande, trabajándola bien, seremos capaces de sacarla.

No debemos intentar levantarla en el aire (salvo las de pequeño tamaño, con estas no pasa nada, porque además aunque se suelte ya íbamos a devolverla). Así la puntera sufre mucho, aparte de que será más fácil que desgarre la trucha (los anzuelos que usamos son finos y con este método no suelen tragar mucho) y por lo tanto se escape. Que no nos dé miedo de tenerla en el agua luchando, aparte de ser mucho más divertido.

trucha-buena

Iremos recogiendo la caña, hacia atrás, poco a poco. No será necesario plegarla, simplemente ir deslizándola por detrás de nosotros. Así acabaremos con la trucha casi en nuestras manos. Se podrá también acercarla a una orilla, si es tipo playita de arena o piedras, y arrastrarla fuera, si la pieza es grande. Siempre con cuidado de no levantarla en el aire, por lo que ya comentamos.

Y por supuesto, no dañar al animal si no da la talla, para poder devolverlo al agua sin daños.

MONTAJE DEL APAREJO

Esta es una de las cosas más sencillas en esta pesca. Simplemente será un trozo de hilo, un nudo en la puntera y un nudo en la mosca. Nada más.

La longitud del hilo es lo más importante, sobre el medio metro. Con 50cm será suficiente en la mayoría de las ocasiones. En casos que el río sea bastante despejado y lo podamos necesitar, 60 o 70cm. Más será contraproducente para la clavada y manejarnos bien entre la vegetación.

1

Si hay algún lío, hilo tramado… pues se corta y se hace uno nuevo. Rápido y sin complicaciones.

Si vamos a usar tándem, recomiendo las microanillas. Un trao de 50cm desde la puntera, una microanilla, un trozo muy corto de hilo, como unos 5-6cm y una mosca. Y otro tramo de hilo, un pelín más largo y otra mosca.

MEJORES ÉPOCAS

Sin duda la mejor época es hacia media temporada y al final de ésta. Con las aguas más altas, puede ser más efectivo el señuelo sumergido (ahogada y ninfa) y cuanto más bajas la seca. Aunque nosotros normalmente pescamos siempre con seca, por parecernos más entretenido.

BENEFICIOS DE ESTE MÉTODO

Los beneficios son varios. Primero, poder acceder a ríos que de otra forma no sería posible, por ejemplo en verano cuando se cierran de maleza. Si a principios de temporada a cucharilla sería posible, llega un momento en que no, y ahí puede entrar la mosca.

Otro es sustituir el cebo natural por uno artificial. Sin duda nos podríais decir que con un saltamontes, grillo o incluso lombriz (miñoca) podríamos hacer lo mismo. Y sin duda es cierto. La diferencia es que a mosca es mucho más rápido, más limpio y, por qué no, no tenemos que andar matando ni cazando animales antes.

red-tag-final

Otro beneficio es que es muy selectivo. Prácticamente todas las truchas las podremos devolver. Con cebo natural tragan mucho más (no se clava tan rápido) y aunque queramos, puede ser imposible devolver una trucha con vida.

Y otro más, lo divertido. Normalmente tendremos más saltos, más actividad, con la seca por supuesto. Con la ninfa aunque la tengamos, no la vemos. Pescando en superficie lo podremos pasar realmente bien, con un salto tras otro. Eso sí, preparémonos porque muchas no clavan. No será culpa vuestra normalmente, si no que la pesca es así.

RECOMENDACIÓN DE MATERIAL

Es una duda que siempre sale, y aunque recomendar material es un tema de gustos, más que otra cosa, vamos a poner el que utilizamos nosotros:

Caña: una Abu García Diablo Speed Pole-700. Es una caña de 298gr de peso. Construcción High carbón, acción Fast and Heavy y 685cm de longitud. Muy liviana para jornadas largas, potente y a un precio muy bueno. Por supuesto hay mil opciones, pero la relación calidad/precio de esta la hace recomendable.

caña

Hilo: aquí suelo usar dos. Cuando es con seca, un Cinnetic Calibra, hilo que viene con el diámetro perfecto, con buena resistencia al nudo y que la verdad me da muy buen resultado. Es el mismo que uso para los terminales en mosca seca. Y cuando es ahogada o ninfa, suelo poner un Cinnetic SkyLine, fluorocarbono, con muy buena resistencia, también en el  nudo. Por soportar más kg suelo poner un diámetro un poco inferior, normalmente un 0,14.

Moscas: Sin duda la gran duda una vez metidos a pescar. Y como siempre, dependerá de mil factores y gustos. Mis recomendaciones son las que también se van subiendo como fichas de montaje, podeis verlas en la web. Tricópteros en diferentes tamaños, muy cómodos para ver en las corrientes y que flotan bien. Efémeras, sobre todo para aguas más tranquilas. Moscas de conjunto. Ninfas perdigones, clásicas como las Pheasant tail, o la oreja de liebre… Echadles un ojo en la sección de montaje de moscas y también podréis comentar en el foro.

final

Flotabilizador. Es recomendable echarle, si estamos con seca, esta grasa. Hará que la mosca se mantenga a flote más tiempo. Si no tendremos que estar secándola cada poco tiempo.

Abrimos un hilo en el foro para cualquier consulta o comentario:

Os dejamos un vídeo en el que se puede ver esta pesca. Sobre todo en la parte final, los últimos 15 min: